Todo inició con un pequeño taller de encuadernación, en 2019 mi hermano me regalo el curso, al aprender a encuadernar me pareció algo fantástico, pero muy complicado. Desde pequeña tenía un gusto por las cosas de papelería y las manualidades. Un día decidí regalarles a mis compañeros de la clase de inglés (siempre estoy tomando clases) una libreta, éramos pocos, debo aclarar, uno de ellos me dijo ¿las haces para vender? A lo que yo respondí que sí; aunque no nunca había vendido una. ¡Me pidió 30 libretas!
Aquí les muestro la entrega de ese día, muchos me entenderán lo cansado y satisfactorio que fue entregarlo, porque no había dormido, no supe cómo lo terminé y hasta me invitó a la pachanga.
De ese pedido a la idea de bordar las portadas pasó un año porque simplemente no creía que fuera a funcionar y la verdad solo buscaba una fuente de ingresos de forma rápida.
Pero llego pandemia y todos sabemos que significa eso, ¡encierro total! Ya tenía medio estructurada la idea, el nombre siempre fue Liberosis, el cual es un sentimiento, de que las cosas te importen menos, lo encontré por ahí en internet y me gusto, el logo no lo tuve listo hasta que con ayuda de mi gran amiga Marisol lo llevo a la luz, una gran artista. Volvamos al punto de que era pandemia y tenía mucho tiempo libre para hacer libretas y sentarme hacer una tesis que tenía pendiente, primero lo primero me decían, pero si era pandemia, ¿cómo iba a tener un caso de estudio? Pues bueno, tenía enfrente una gran oportunidad, así que la tomé, hice mi tesis sobre Liberosis, mi propia marca de libretas artesanales está inspirada en mi abue Natalia, porque ella me enseñó a bordar a los 7 años. Aún la recuerdo sentada al inicio de las escaleras que daban a la terraza, para que le diera la luz, aprendí observándola, porque en realidad no tenía mucha paciencia para enseñarme, hasta que vio que sí me gustaba, en ese espacio de la casa entre la cocina y el comedor aprendí muchas cosas, aunque mi abue ya no está en este plano, sigue enseñándome que las puntadas se hacen de nuevo si no quedaron bien con mucho amor.
Terminé la tesis y comencé a recibir pedidos, todos los que conocían mi marca querían una Liberosis. En mayo del 2022 por fin logre tener un espacio como taller y en mayo del 2023 lo equipe con una máquina de corte vinil, una plancha, una guillotina, una mesa, varias herramientas que no creía el crecimiento e hice un ajuste en el nombre, se cambió por Liberosis Casa Creativa, debido a que con las nuevas herramientas se estaban integrando nuevos productos y servicios.
Hoy en día Liberosis Casa Creativa está cumpliendo 4 años en el mercado, con dos principales líneas de productos: un diario de Agradecimiento Querida yo y Como las Olas una Liberosis para liberar tu creatividad.
Liberosis Casa Creativa es más que una marca, es un sueño hecho realidad. Es un espacio donde la pasión por el arte y la creatividad se unen para crear productos únicos y personalizados. Es un reflejo de mi propio crecimiento como emprendedora y como persona.
